Hijo te Amamos

Lilypie Kids Birthday tickers Lilypie Kids Birthday tickers

martes, 29 de junio de 2010

Aumentan las Esperanzas


El plazo se cumplió. Hoy martes en punto de las 9:30 llamaron a la puerta de mi casa. Era la trabajadora social del DIF para hacer la visita a nuestro hogar y analizar si es un lugar adecuado para un niño.
Reconozco que tuve nervios previo a la visita… sin embargo todo fluyó muy bien. La chica fue muy amable y hasta empática con nuestro caso. Fue una charla donde preguntó sobre la familia, tanto mía como de mi esposo, nuestra historia, cómo nos conocimos, cuándo, en qué momento decidimos adoptar y el por qué.
Y hubo una pregunta que me llamó poderosamente la atención: ¿Es el primer lugar donde buscan adoptar?, la respuesta fue afirmativa.
Luego me di cuenta que el DIF es, para muchos, la última opción para adoptar un hijo. La mayoría busca hacerlo de particular a particular: mujeres, que por diversas circunstancias no pueden tener a su hijo y lo dan en adopción a alguna pareja sin hijos a cambio de que le paguen el hospital, su manutención durante el embarazo, etcétera.
También hay quien recurre a abogados que buscan mujeres que no quieran a sus vástagos y ellos son intermediaros para se adoptados.
Hay otra manera: Lugares donde dan asistencia a mujeres embarazadas que son abandonadas por su familia o parejas y ante su estado de indefención les dan albergue, comida, asistencia médica, psicológica y espiritual, además de enseñarles algún oficio y tratan de convencerlas de que conserven al bebé; si después de todo esto no quieren, entonces se le otorga a una pareja que desean tener un hijo.
Estas son las formas más socorridas, cuando todo eso falla, entonces es cuando muchos recurren al DIF.
La razón es sencilla: DIF no es una casa cuna, sino una institución que vela por el bienestar de la familia, la mujer y el menor. Cuando un niño sufre maltrato (de cualquier tipo) se lo llevan a sus albergues, se trata de arreglar la situación con la familia consanguínea y si no hay arreglo posible para que se hagan cargo de él, entonces es cuando se da en adopción.
De ahí que sea casi imposible que entreguen en adopción a un niño DIF (como se les llama) recién nacido.
Cuando nosotros decidimos empezar este proceso conocíamos esta situación… y la aceptamos. La mayoría de familiares y amigos que conocen nuestra intención nos han dicho que es mejor un recién nacido para que “lo hagamos a nuestro modo”, “para que no sepa que es adoptado”, y muchas cosas por el estilo.
Primero, un niño no es un muñeco para “hacerlo a nuestro modo” y por supuesto que va a saber que es adoptado aunque nos lo entreguen de meses de edad.
Como pareja y futuros padres estamos convencidos que el amor todo lo puede, todo lo vence y que cualquiera que sea la situación de la que venga nuestro hijo vamos a salir adelante; en el DIF por eso nos preparan, dan seguimiento y además, de ser necesario, por nuestro lado también buscaríamos la ayuda pertinente.
Además de que tiene derecho a saber su realidad y jamás le vamos a esconder la verdad, porque no será hijo de nuestra sangre, pero sí de nuestro corazón, de nuestra alma, de nuestro amor.
Todo esto se habló con la trabajadora social y, por su cara, me di cuenta que no vamos tan mal, que nuestro hijo es casi seguro será un niño DIF.
Qué diferencia de la psicóloga que nos atendió hace un año, ahora nos sentimos apoyados, nos guían, nos impulsan, despejan nuestras dudas, y sobre todo, no hay miradas desaprobatorias, comentarios fuera de lugar e hirientes y mucho menos críticas sobre la familia que deseamos.
Al final de la entrevista, me atreví a preguntar a la trabajadora social si, desde el trabajo que a ella le corresponde hacer respecto a nuestro expediente, somos una pareja apta para adoptar.
En otras palabras: ¿pasamos la prueba?, y sin dudarlo y con una sonrisa me respondió: “Sí”.
La alegría me inundó, el corazón se aceleró y me sentí cerca, muy cerca de mi ángel.
Todavía faltan varias sesiones del curso para padres, y entrevistas psicológicas para completar nuestro expediente y luego pasar al comité de análisis que verán si hay un niño, actualmente, disponible para nosotros, mejor dicho, que seamos la familia adecuada para un niño que necesite un hogar y unos padres que lo amen, lo cuiden y lo guíen.
¿Cuánto tiempo?, no lo sé, pero me siento más viva que nunca, con mucho entusiasmo, y sobre todo, cada día y cada noche, pienso en mi ángel, al que le mando todo mi amor y bendiciones a donde quiera que esté.
Aclaro que siempre me expreso de mi hijo en masculino, y sí, tenemos predilección por un hombrecito, pero, si hay una nena para la que tengamos el perfil familiar que se requiere para ser adoptada: ¡bienvenida sea!

domingo, 27 de junio de 2010

Lo que Algún día Espero ver con mi Hijo


Desde hace semanas traía la intención de ir al cine. Era un gusto que quería darme junto con mi esposo, pero se fue posponiendo por no encontrar la película que ambos quisiéramos ver. Por fin, hoy en la madrugada le dije: "Vamos a ver Toy Sory 3, dicen que la historia es muy buena"... y aceptó.
No sé si por darme gusto o de plano porque también deseaba verla, lo que sí es un hecho es que no le gusta ir al cine cuando hay niños pequeños porque generalmente se aburren, lloran o juegan durante la función.
Pero hoy no pasó eso, sí había niños en la sala, más o menos mitad y mitad, entre niños y adultos; porque también había personas que íbamos sin pequeños.
La película me gustó, me hizo reir, reflexionar y por momentos hasta tuve ganas de llorar, es una histporia conmovedora.
No soy crítica de cine, pero a mi parecer sí es buena película. Y lo que más me gustó es que al terminar, abandonamos la sala y vi a muchos padres con sus hijos saliendo felices, riendo, comentando... conviviendo.
Y me emocioné, me imaginé que un día nosotros vamos a estar así, con nuestro hijo disfrtuando de esos momentos de diversión, y aunque tenga que ver todas las películas infantiles, o de acción, o de lo que sea... todo por disfrutar juntos con nuestro ángel.

sábado, 26 de junio de 2010

Visita el Martes


El martes será un día crucial para la elaboración de nuestro expediente. Ese día a las 9:30 irá a nuestra cosa la trabajadora social.
NO sé exactamente de qué se trate, pero hasta donde entendí es para ver que nuestra casa sea la adecuada para que un niño tenga una buena calidad de vida. Estamos tranquilos y todo marcha de la mejor manera posible. Todo esto que estamos viviendo nos ha unido mças como pareja, nos sentimos con más entusiasmo para hacer las cosas y que todo llegue a buen término.
En menos de quince días hemos dado grandes pasos para el encuentro con nuestro hijo, la emoción, el anhelo, la ilusión a reforzado el amor con el que lo esperamos. Reconozco que sí hay temores, pero es más el deseo de tenerlo, de completar nuestra familia; estamos dispuestos a enfrentar los retos que vengan porque estamos convencidos que con amor, todo es posible.
Ahora disfruto enormemente los momentos que paso platicando y planeando cosas con mi esposo, la convivencia es más amena, me siento sencillamente feliz.

jueves, 24 de junio de 2010

Seguimos Avanzando


Tenía muchas cosas que decir, pero estoy en el trabajo y entre una cosa y otra no se pudo escribir este post en el momento en que las ideas revoloteaban en mi cabeza.
Sin embargo, no quiero dejar para después el plasmar los acontecimientos de este proceso que ya está en marcha, ahora sí, y que nos tienen muy contentos y satisfechos.
Desde hace una semana comenzamos con el curso que llaman “Escuela Para Padres”, no se trata de ir a aprender cómo educar a un niño, tampoco es un manual para padres, sino un taller donde se habla de los emociones por las que se pasa cuando se está en el camino de la adopción.
Por cuestión de tiempo, la licenciada que lleva nuestro caso hizo una excepción y nos metió al curso cuando éste ya había empezado, nos incorporamos a la tercer sesión. Nos explicó que si esperábamos al siguiente tendrían que pasar cuatro meses como mínimo y que no era seguro que iniciara cuando en nuestro estado habrá elecciones para elegir gobernador, presidentes municipales y diputados, además de que habrá cambio de personal porque llegarán las personas que designe el nuevo mandatario en su gabinete. En pocas palabras era ahora o nunca, y decidimos aprovechar la oportunidad.
En ese curso nos recomendaron un libro, que por cierto nos entregarán hasta hoy que será la reunión, que habla sobre adopción y todo lo que implica decidir tener un hijo de corazón.
En esa primera reunión me sentí muy bien, por primera vez estuve frente a frente con personas que pasan por lo mismo que nosotros, con las que se puede hablar sin temor a encontrarse con esos comentarios de “mejor ten el hijo tú”, “la sangre es la sangre” y cosas por el estilo que en lugar de ayudar, lastiman.
Ahí todos, de una u otra forma, hemos pasado por experiencias parecidas sobre lo que es decidir adoptar un hijo, compartimos vivencias que, al menos a mí, me fortalecieron.
Durante toda la semana me sentí entusiasmada, pensando en que ese curso nos acercaba más a nuestro hijo… y hoy por la tarde me llevé una gran sorpresa cuando llega un mensajero a casa y nos deja un aviso de que tenemos que ponernos en contacto con el área de Trabajo Social del DIF para que nos hagan la visita a nuestro hogar e ir integrando el expediente con los estudios correspondientes para ver si somos una parea “apta” para adoptar.
Mi felicidad no puede ser mayor, porque aunque parezca complicado, no lo es. Es otro paso más en el proceso y tengo mucha fe y confianza en Dios en que todo va a salir bien. Hoy nos pondremos en contacto con la trabajadora social para concertar esa cita y que visiten nuestra casa; cuando recibí el aviso ya no era hora de oficina, ellos trabajan de ocho de la mañana a tres de la tarde.
Así que hoy será un gran día, espero que las cosas sigan así. Confieso que hubo momentos en que me desesperé por el estancamiento en que caímos, hubo dudas en si estábamos haciendo lo correcto en tener paciencia y más paciencia.
Sé que el camino todavía es largo, pero comenzamos a avanzar nuevamente y sólo espero que mi ángel, donde quiera que esté, sea feliz y nos espere con la misma ilusión y amor que nosotros a él.

lunes, 14 de junio de 2010

¡Recomenzamos!


Pues sí, hoy ha sido el día en que volvemos a tomar camino para encontrarnos con nuestro hijo: ¡Nuestro expediente ya está otra vez encaminado!, sí, hoy me citaron del DIF para darme la noticia y el jueves, a primera hora, empezamos el curso de orientación familiar o escuela para padres, como se le llama. Más feliz no puedo estar, porque dicho curso ya ha empezado y la licenciada que lleva nuestro caso se ha portado de lo más solidaria y me dijo que se va a hacer una excepción y que seremos incluidos en ese grupo, ya que el próximo curso es hasta dentro de tres meses.
Y claro que acepté, no importa que se tenga que "sacrificar" horas de trabajo, de sueño, de lo que sea: todo vale la pena si se trata de nuestro pequeño.
Estoy tan entusiasmada que quisiera que el tiempo "volara" para empezar ya ese curso y seguir con lo que nos vayan marcando.
No sé si llamarlo instinto, presagio o simplemente certeza de que pronto, muy pronto seremos tres en esta familia.

domingo, 6 de junio de 2010

¡Gracias!



Estos meses de ausencia, como se imaginarán, fueron por causa de fuerza mayor. Estas semanas han sido difíciles. Una montaña rusa de emociones y de ir y venir al hospital. Por fin, el pasado 28 de mayo se realizó la cirugía. Y como dije en el post anterior, La fe mueve montañas, porque gracias a esa fe que depositamos en Dios y a la oración de muchas personas; familiares, amigos y hasta personas solidarias que sin conocernos se unieron con nosotros en oración; a la fuerza, amistad y buenas vibras de amigos de este blog, se logró salvar el seno de mi hermana.
La cirugía consisitó en quitar células de la axila; y aunque todavía no podemos cantar victoria, estamos optimistas. Los resultados de patología los entregan el día 14 y el 23 el oncólogo nos dirá cuál es el proceso a seguir: radioterapia, quimioterapia, sólo medicina, en fin, lo que sea lo aceptamos con gusto para lograr una reuperación total.
Mi hermana se ve mucho mejor, la familia vuelve a estar más tranquila y yo tomé mis vacaciones para estar con mi hermana en el hospital y luego cuidarla en su recuperación. Todavía tengo una semana de descanso, así que me alegra porque podré estar a su lado más tiempo.
Y bueno, en cuanto al tema principal del blog, que es nuestro hijo, les informo que hace unos días el DIF entregó siete niños (entre 2 y 10 años) en adopción. Ya falta menos, confiamos en que llegue el momento de la llamada que nos avise que tendremos a nuestro ángel con nosotros.
Ese momento es el que más espero y deseo, hay días en que mis pensamientos son sólo para esa persona tan amada y esperada, la que tiene un lugar en nuestra vida, nuestro hogar y sobre todo, en nuestro corazón.
Me consuelo al pensar que cada día que pasa, es uno menos para que esté con nosotros y entonces sí completar nuestra familia.
Gracias a todos por estar, por pasar por este blog, por leerme y comentar. Un abrazo fuerte y seguiremos en contacto